Las lesiones más comunes del pádel

En los últimos años, el pádel se ha convertido en un deporte de masas, siendo uno de los deportes de raqueta más populares. Sin embargo, como en cualquier otro deporte, corres el riesgo de lesionarte. Hoy vamos a explicar las lesiones más comunes del pádel, cuales son, las causas y también te daremos algunos consejos para la prevención.

Lesiones más frecuentes en el pádel

Parece que no, pero el pádel es considerado un deporte bastante lesivo sobre todo en los jugadores “novatos”. Y es que durante el juego se producen muchos giros, saltos, arrancadas, repeticiones de movimientos y frenadas, motivos más que suficientes para que se produzca alguna lesión, por lo que es importante empezar a jugar a pádel con paciencia y no querer avanzar de nivel rápidamente.

La más popular, esguince de tobillo

Sin duda es la que más jugadores sufren y es que cualquier torcedura o mal apoyo puede derivar en un esguince de tobillo. Este tipo de lesión afecta a los ligamentos de la articulación, provocando un sobre estiramiento o distensión. En el peor de los casos, puede producirse una rotura del ligamento.

Hay diferentes grados de esguince de tobillo, depende de si es tipo 1, 2 o 3 requerirá inmovilización, reposo y la ayuda de un fisioterapeuta. En cualquier caso, esta lesión nos obligará a estar unas semanas fuera de las pistas. Es recomendable hacer una buena recuperación, ya que de esta manera fortaleceremos el tobillo y podremos evitar recaídas.

Contracturas musculares en el pádel

Este tipo de lesión es una contracción involuntaria de las fibras del músculo, causando la sensación de “tener un nudo”. Notaremos la zona afectada endurecida y la causa más común es un sobre esfuerzo de la musculatura. Para evitar las contracturas en el pádel, recomendamos hacer un buen calentamiento ya que así se activan todos los músculos del cuerpo además de estirar al acabar.

En la mayoría de casos, las contracturas suelen ser leves y puede durarnos un par de días. Una vez estamos contracturados, es recomendable hacer reposo y también aplicar calor para relajar la musculatura. Si las molestias siguen, acudir al fisioterapeuta para realizar una buena recuperación y fortalecer la zona.

Codo de tenista o epicondilitis

Este tipo de lesión la padecen muchos jugadores y es muy molesta. El codo de tenista se produce por la inflamación de los tendones que atraviesan el codo. Esto provoca dolor en el antebrazo e incluso la muñeca. La epicondilitis también puede ser provocada:

• Por una empuñadura demasiado gruesa, así que hay que tener cuidado al añadir overgrips.
• Por una mala técnica en la ejecución de los golpes.
• Por una mala elección de la pala.

Así pues es muy importante una buena elección a la hora de comprar una pala de pádel, ya que si juegas con una pala pesada y con el balance tendrás que hacer más esfuerzo. En cambio, una pala redonda y con balance bajo es más manejable y, si encima es blanda, absorberá mucho mejor las vibraciones impidiendo que estas se transmitan al brazo, igual de importante saber agarrar la pala para no sobrecargar la musculatura.

La recuperación de la epicondilitis es larga ya que obliga al jugador a dejar las pistas durante semanas e incluso meses. Así pues hay que tener mucho cuidado con este tipo de lesión y tener paciencia para recuperarse.

Roturas musculares

Las roturas musculares en el pádel se producen por una contracción brusca del músculo o por una elongación. Este tipo de lesión es habitual que se produzca al principio de empezar a jugar o también durante el partido a causa de la fatiga muscular.

Por ejemplo, si no calentamos bien puede ser que al hacer un sprint nos rompamos fibras del cuádriceps o isquio. También puede producirse si llevamos al músculo al límite, es decir, si continuemos haciendo esfuerzo cuando el músculo está “agotado”.

El tratamiento que se suele aplicar, dependerá de los centímetros de la rotura, es poner hielo en la zona afectada y un vendaje compresivo para contener la hemorragia. Después hay que mantener reposo y seguir aplicando hielo a menudo. Para acabar se necesitará la ayuda de un fisioterapeuta para la rehabilitación.

Lesión de hombro

El hombro es una articulación muy compleja dónde pueden producirse diversas lesiones. Sin embargo, la más habitual es la tendinitis del manguito rotador. Se produce por ejecutar movimientos repetitivos e intensos. El remate y la bandeja son de los golpes más agresivos para el hombro.

Este tipo de lesión es bastante dolorosa y puede ocasionar pérdida de fuerza además de limitación en los movimientos del hombro. Recomendamos reposo absoluto, hielo para bajar la inflamación y acudir a un especialista para seguir una rehabilitación adecuada.

Fascitis plantar

La fascitis plantar provoca dolor en el talón y la planta del pie, provocado por la inflamación de la fascia plantar ya que está excesivamente estirada. Con este tipo de lesión hay que tener paciencia porque cuesta que desaparezca el dolor, así que si la sufres recomendamos reposo y mucha paciencia.

Puede ser causada por una mala elección del calzado de pádel, por el tipo de pisada, el arco de apoyo o el exceso de actividad. En cualquier caso, es una de las lesiones del pádel más molestas. La mejor prevención es incluir en nuestro programa de estiramientos uno específico para la planta del pie, por ejemplo, tirando de los dedos y antepié hacia nosotros.

Lumbalgia

Más conocida como lumbago. Es una lesión que se produce en la parte inferior de la espalda y genera una molestia continuada. Este tipo de lesión es debido a la gran cantidad de impactos, giros y movimientos de la columna que realizamos durante el partido.

También puede influir el acortamiento de la musculatura o un core poco fortalecido. La lumbalgia provocará una sensación constante de malestar continuado, así que lo mejor es guardar reposo y realizar un trabajo de rehabilitación.

Otro tipo de lesiones no tan habituales

También queremos hacer referencia a las lesiones de muñeca en el padel. La lesión de muñeca más habitual es la fractura del escafoides, un pequeño hueso que tenemos en la muñeca. Es una lesión que requiere la inmovilización de la articulación durante unas semanas y es bastante dolorosa.

Respecto las lesiones de rodilla en el pádel, destacamos la tendinitis rotuliana. Es una lesión en el tendón que conecta la rótula con la tibia. Algunos jugadores la sufren debido a la gran cantidad de saltos que se realizan en el pádel. El tratamiento de la tendinitis rotuliana se basa en terapia física para estirar y fortalecer los músculos alrededor de la rodilla.

Consejos para prevenir las lesiones del pádel

Podemos darte algunos consejos:

• Hacer un buen calentamiento antes de empezar a jugar a pádel para que todos los músculos entren en calor.
• Mantener una buena hidratación durante el ejercicio para evitar calambres o fatiga muscular.
• Jugar con el material adecuado, sobre todo utilizar zapatillas de suela clay para no patinar.
• Descansar bien. Dormir 8 horas diarias y respetar los días de descanso nos ayudará a evitar el sobre entrenamiento, ya que un exceso de actividad puede derivar en lesiones.
• Estirar después de jugar. Dedica unos 10 minutos para hacer un estiramiento general, así evitarás contracturas y agujetas.

Y hasta aquí nuestro artículo sobre las lesiones más frecuentes del pádel. Esperamos haberos ayudado a identificarlas y sobre todo, a prevenirlas. Aunque, como en cualquier otro deporte, la mejor prevención es un buen calentamiento!